No venda si usted mismo no se ha vendido
No
venda nada que usted mismo no se haya ya vendido personalmente. Si usted mismo
no comprase el producto, entonces aléjese de él.
Encuentre
un producto que usted mismo se haya vendido. Algo en que usted verdaderamente
crea. He oído a muchos veteranos decir que si usted compra lo que vende, está
muerto en ese campo de ventas en particular.
Esta
aseveración es incorrecta. Los clientes pueden percibir a través de los
movimientos del vendedor, sus reacciones e intenciones, si éste es sincero en
lo concerniente a su producto.
Por
lo expuesto, no se engañe, no trate de vender un producto nada más porque esto
es lo que tiene en ese momento... a menos que usted se sienta genuinamente vendido
a él.
Si
usted quiere vender nada más por vender, será definitivamente un perdedor, por
más que al producto se lo quiten de las manos. Usted estará vendiendo
falsedades y ningún vendedor viviente puede ser nunca el mejor si su corazón no
está puesto en ello.
El
vender una falsedad no imparte nada positivo al corazón.
No venda nada solo por ganar una comisión
He
visto muchos, multitud de vendedores flotar de un producto a otro nada más
porque este produce una mayor comisión. Es correcto pasar de un producto a
otro, pero ello debería hacerse porque el vendedor ya está vendido a ese
producto en particular, con el mismo grado de entusiasmo que demuestra por la
comisión que se paga.
Si
lo hace solo por la comisión no será tan efectivo, tan bueno como pensaba que
lo era.
Cierto
entrenador de fútbol alguna vez exhortó a su equipo "sientan orgullo
por su trabajo, pónganse a prueba en cada jugada, muestren dedicación y
diviértanse y las anotaciones se encargarán del resto". He encontrado
que esto también se aplica a las ventas. La comisión estará allí, si usted hace
su trabajo.
Aléjese de los vendedores "veneno"
No
escuche las pequeñas charlas de oficina (a menos que sea posible aprender algo
positivo). Las conversaciones negativas fomentan una enorme atmósfera negativa
y la mejor forma de protegerse es ser, en ciertos aspectos, un solitario.
Antes
de salir hacia su visita con un cliente, manténgase siempre alejado de los
demás vendedores y piense en sí mismo, sólo en cosas buenas, sólidas y
positivas.
Esté
convencido de que va a salir y vender a ese cliente y que nada en este mundo
puede detenerle, excepto usted mismo. Luego, cuando ya adquiera en sí mismo el
marco mental correcto, con una sonrisa sincera y positiva en el rostro, ya es
tiempo de enfrentarse a su cliente.
El
cliente, en este momento, es solamente suyo. Únicamente los dos, usted y él,
están comprometidos. Así pues, sea positivo, alerta y preséntese en la mejor
forma posible.
Aléjese
de esos vendedores deprimidos o cuyos sentimientos sean negativos. Es verdadero
veneno.
De
cualquier modo ¿Qué pueden hacer por usted esa clase de vendedores? Nada puede
hacer, sino tratar de que usted llegue a sentirse igual a como él se siente. Si
usted le escucha o permanece en su presencia, le destruirá.
Por
tanto, sea un solitario antes de acercarse a su cliente... y ahora entre y
logre una venta.
______________________________________________________________________
No hay comentarios:
Publicar un comentario