Translate

martes, 6 de febrero de 2018

Blockchain, criptomonedas y tokens: así va a cambiar el sector turístico



Tokens, critptomonedas y blockchain. Este es uno de los escenarios más probables hacia el que se dirige la industria tecnológica. Uno de los escenarios con más potencial para impactar en la economía real. Y uno de los escenarios, como explicaron varios de los expertos que la semana pasada intevinieron en FiturTech, que con más fuerza pueden disrumpir el sector turístico.

De hecho, en la popularización del blockchain descansan parte de las esperanzas de muchos agentes turísticos, que aspiran a poder minimizar la dependencia que ahora mismo tienen de las grandes plataformas intermediadoras (Booking, Trivago, Kayak, etc) para competir de una forma mucho más libre.

Blockchain y la confianza distribuida

Como explicó en su ponencia el emprendedor e inversor Carlos Barrabés, hace tiempo que los hoteles (y otras empresas turísticas) son esencia un conjunto de APIs, donde cada vez cobran más importancia tecnologías como Big Data, Machine Learning o Internet de las Cosas.

Son compañías que tras digerir mal que bien el impacto que ha tenido Internet para sus negocios, viven en redes centralizadas, “enchufadas” a grandes plataformas que por su peso en el sector, se han convertido en infraestructura (como puede ser la luz o el agua) y que por lo tanto, tienden al monopolio.

Prueba de lo anterior es que el pasado mes de septiembre algunos dijeron basta y acudieron a los tribunales para denunciar las que consideraban malas prácticas (fijar tarifas y condiciones de reserva) en plataformas como Booking (63% del mercado) Expedia (17% del mercado) o HRS (12%).

Pero mientras los tribunales resuelven y el panorama tecnológico no cambia, las plataformas van a seguir siendo ese “mal necesario” del que depende el grueso de los ingresos para estas compañías. ¿O no?

Si hacemos caso a Barrabés, en un futuro (ni tan cercano como a algunos les gustaría, ni tan lejano como podría parecer) esto va a dejar de ser ser así. ¿La idea? Que gracias al blockchain pasemos de este escenario de redes centralizadas a otro muy diferente de redes distribuidas, en el que desaparece el papel del intermediario. Barrabés lo dice de la siguiente forma:

La democratización que trae el blockchain es imparable. Se podrán hacer el 99% de las cosas que hacemos hoy en día, sin necesidad de intermediarios. Estamos en un camino en el que se va a tokenizar el mundo. Cualquier acuerdo, cualquier cosa que hagamos va ser tokenizable.

De la misma forma que los usuarios/clientes realizan las reservas en estas plataformas porque confían en ellas, ese futuro que pintan los profetas del blockchain “la confianza estará distribuida” y cada actor será un nodo capaz de conectar con su “audiencia” sin necesidad de intermediación.

¿Se acaba por lo tanto el “reinado” de las plataformas? No del todo. Algunas seguirán gozando de cierto protagonismo, pero su papel mutará. O como aseguró Barrabés , “el intermediador con más futuro es el que desintermedie bien”.


Turistcoin y las criptomonedas verticales

Si el blockchain tiene un brillante futuro por delante, el futuro sobre criptomonedas como el Bitcoin es más difícil de pronosticar.

Por un lado, es difícil negar que ésta y otras critptomonedas hayan empezado a impactar en nuestras vidas. Tal vez todavía sean muy pocas las personas que las utilizan para adquirir bienes o servicios, pero ya no resultan extrañas las conversaciones con amigos y familiares en las que se comenta que se ha invertido en tal o cual moneda virtual nueva con la esperanza de una futura rentabilidad.

Pero por el otro, para algunos expertos las señales que envía el “mundo cripto” indican el estallido de la próxima gran burbuja especulativa de nuestro tiempo. Sin embargo, optimistas como Carlos Kuchkovsky (CTO New Digital Business del BBVA) afirman que en realidad nos encontramos en un “momento iPhone”, es decir: de la incredulidad/decepción sobre el éxito de una tecnología, pasaremos a su crecimiento exponencial.

O como explica Moisés Cano, responsable de Touristcoin, incluso si llegase a estallar una burbuja, nos dirigiremos hacia una normalización del mercado. Una normalización que podría traducirse en un Bitcoin que pase asumir el papel de “moneda refugio” (o patrón oro), y la estabilización del mercado cripto en torno a 20-30 grandes monedas que desarrollen nichos de mercado concretos.

En este ecenario de verticales, propuestas como las de Touristcoin servirían en este caso para articular un mercado turístico cada vez más fragmentado. Y es que según el business plan de estos jóvenes emprendedores, por primera vez el sector podría contar con una moneda universal, que no sólo serviría como medio de pago, sino que además permitiría fidelizar a los clientes que la utilizan.

Volvemos en este sentido al concepto de confianza distribuida. Si tanto comercios como usuarios confían en un futuro en el valor que tiene una criptomoneda como Turistcoin (segura, anónima, asociada a recompensas, etc), el cielo es el límite.

De momento la compañía está dando sus primeros pasos y según explicaron en FiturTech, en marzo de este año preparan el lanzamiento de su ICO. Y pese a lo “excéntrico” que para algunos pueda resultarle su propuesta de valor, en el sector turístico no son los únicos.

Grandes compañías como Amadeus o Destinia aceptan desde hace tiempo el pago en Bitcoins y otras criptomonedas. La plataforma de reservas on-line CheapAir.com ha conseguido facturar más de 1,5 millones de dólares en divisas virtuales e incluso pequeños establecimientos como el “Hotel Ginebra” de Barcelona o cadenas como One Shot Hotel, ya se han subido a la nueva ola.

Rodolfo de Juana
_______________________________

1 comentario:

  1. Muchas gracias al blog de Mind Capital, por toda la información que nos comparten y así seguir sus consejos.

    ResponderEliminar