Aprender es la capacidad de adaptarse al entorno. Aprender es innovar. Aprendemos cuando cambiamos. Innovar es la otra cara de aprender. Y el aprendizaje y la innovación serán sociales y en red.
A principios del Siglo XXI sabemos que la principal prioridad empresarial es la adaptación a entornos más complejos lo que implica directamente potenciar un aprendizaje organizativo más eficiente. Y sabemos que para potenciar estos entornos las nuevas formas que utilizaremos serán sociales entre iguales, inclusivo, mediante entornos virtuales.
Crear comunidades (nuevas formas organizativas) espacios donde conectar ideas, historias y conversaciones es la nueva forma de aprender e innovar. Por ello, los procesos de talento deberán enfocarse cada vez más en gestionar comunidades para acelerar el aprendizaje organizativo que deviene cada vez más estratégico como palanca de innovación.
La transformación digital obliga a que las organizaciones y especialmente los departamentos de RRHH focalicen sus esfuerzos en la conectividad del talento para potenciar la inteligencia colectiva de la organización: su capacidad para generar soluciones/mejoras de negocio.
Desarrollo Organizativo, conectivismo y competitividad
El aprendizaje organizativo social no es un concepto o termino nuevo, pues hay una corriente de management de más de medio siglo de existencia que se denomina D.O. Desarrollo Organizativo cuyos padres son Kurt Lewin y Edgar Schein que ya nos hablaban de cómo el aprendizaje más relevante para la adaptación empresarial es de tipo social y está profundamente relacionado con la Cultura Organizativa. Estos enfoques durante décadas han sido muy utilizados como herramientas de cambio y mejora organizativas. En los últimos años se están incorporando los conceptos de conectividad. Y sitúan el aprendizaje social cómo la principal modalidad de aprendizaje en nuestras organizaciones.
De todas estas teorías y enfoque las más relevante para entender las nuevas formes de aprender en la era digital es el conectivismo, que según George Siemens establece que el aprendizaje parte de la diversidad y que surge para conectar personas (nodos) y que depende de la calidad de sus conexiones y dónde la toma de decisiones es también en sí mismo un proceso de aprendizaje.
Las tecnologías sociales digitales han hecho que el aprendizaje social y colaborativo se sitúe cómo herramienta competitiva, un aprendizaje que incluye cómo elementos claves de aprendizaje la toma de decisiones y el trabajo real, se aprende más cuando estas mejorando, innovando o sistematizando. La separación entre trabajo y aprendizaje es cada vez más difusa.
Crear conversaciones como elemento básico del aprendizaje
La conversación es el elemento central del aprendizaje social y del desarrollo de personas. Cómo indica Theodore Zeldin es el elemento central de la gestión del conocimiento y del trabajo futuro que potencia y transforma a las personas que participan en ella. La conectividad favorece las conversaciones y favorece el cambio personal o el aprendizaje fruto de la unión de ideas, emociones y experiencias que crean nuevas ideas y que se pueden estructurar de forma cuidadosa para generar este efecto en comunidades.
Cómo destaca John Milton de Knoco la conversación permite hacer explícito lo que está implícito y por ello genera conocimiento. La conversación es más que una transferencia de conocimiento es un proceso social 14 veces más eficiente que la transmisión de información.
La sistematización de estos espacios de conversaciones donde los participantes son expertos y aprendices a la vez, donde pueden dar y recibir conocimiento de los demás tiene en las Comunidades de Aprendizaje su espacio protagonista. El canal aprendiz-docente no ha muerto, ni ha muerto la formación tradicional para los profesionales con experiencia especialmente si hay “inclusividad” es decir, donde la experiencia del aprendiz es fundamental para construir el aprendizaje y el docente actúa más como guía.
La Comunidad cómo arquitectura del Aprendizaje Social
Las Comunidades serán estos entornos donde se creará esta forma de “inteligencia colectiva” que es el aprendizaje social, de forma que permitan nuevos comportamientos que ayuden a impulsar la estrategia gracias a la conversación y al conectivismo, espacios virtuales donde podrán interaccionar, conocimientos, ideas y personas.
Ayudar a sistematizar y hacer más eficientes los entornos de aprendizaje de nuestros empleados puede ser una de las herramientas más importantes para acelerar el aprendizaje organizativo, pues nos permite asegurar que alineamos los intereses organizativos y el comportamiento de nuestros empleados. Las organizaciones necesitan afrontar la complejidad del entorno dotándose de más complejidad interna de más transversalidad y colaboración para multiplicar la eficacia del aprendizaje cómo acelerador del cambio.
Así pues las Comunidades de aprendizaje son espacios virtuales donde se organizan conversaciones para obtener cambios de conducta que facilitan el cambio: aprendizaje. La conversación y la colaboración crea aprendizaje pero tal y cómo nos propone Jane Hart podríamos distinguir:
Comunidad de Aprendizaje donde se aprende implícitamente, de forma informal: Dónde el hecho de trabajar colaborativamente tiene como consecuencia la obtención de aprendizaje, a pesar que el objetivo es la co-creación relacionados con la creación de productos de conocimiento cómo las Comunidades de Práctica de Etienne Wenger o resolver problemas con reglas sencillas cómo Foros de Debate, donde las conversaciones que se producen son de alto valor para el aprendizaje y el cambio comportamental. En realidad muchas otras comunidades de mejora e innovación se aprende implícitamente, pero su objetivo no es el aprendizaje.
Comunidades de Aprendizaje dónde se aprende explícitamente: Donde el único objetivo es la generación de aprendizaje y donde puede haber materiales o no y conversaciones sobre ellos con guía o sin guía dónde el protagonismo lo tiene la dinámica la conversación que versa sobre aspectos donde los participantes tienen ya criterios y conocimientos de referencia pero donde el fin es aprender. Los Entornos Organizativos de Aprendizaje son los nuevos espacios de comunicación donde compartir y colaborar para mejorar el desempeño profesional.
Los profesionales del SXXI de Gestión del talento y #RRHH tienen un nuevo territorio desconocido que deberán conquistar y apropiarse: las comunidades de aprendizaje. La digitalización de nuestras organizaciones es un ejercicio de arquitectura conversacional, donde se trata de asegurar que el aprendizaje social está al servicio de la innovación y la estrategia de la empresa.
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