Valores y filosofía corporativa. Misión y visión. Relaciones laborales y entorno de trabajo. Flexibilidad, conciliación y RSE. Opciones de formación y desarrollo. Políticas de atracción y fidelización del talento. Todos estos términos, tan en auge actualmente en el terreno de los RRHH, son los que definen la cultura organizacional de una empresa. Dicho de otra manera, la cultura organizacional de una empresa engloba todos aquellos elementos que la definen y la caracterizan. Es, por así decirlo, la personalidad de la compañía en cuestión.
Hay compañías que se caracterizan asimismo por tener una cultura organizativa única y tan disruptiva que se han erigido como ejemplos a seguir por parte de muchas otras que buscan incrementar los niveles de bienestar, satisfacción, engagement y orgullo de pertenencia de sus empleados, algo que redunda en unas mayores fidelidad y productividad.
Ahora, es Bizneo el que, a través del artículo Cultura organizacional: qué es y qué tipos existen, deja que nos asomemos a empresas como Netflix y Nike para descubrir qué elementos conforman su cultura organizacional y cómo estos se han traducido en beneficios empresariales.
Libertad, responsabilidad y exigencia. Esos son los tres valores que definen la cultura organizacional de Netflix. La empresa publicaba en 2009 los principios de su cultura organizacional basada en el "freedom & responsability". Un denso compendio, apuntan desde Bizneo, "de 125 diapositivas que pretendía atraer a candidatos y motivar a empleados y que, a pesar de la densidad, tuvo relativo éxito". Cada diapositiva, prosigue el artículo, se la descargaron una media de 1.000 personas.
Pese a la adhesión masiva de este primer documento, ocho años después la compañía decidió resumir todo ello en un documento más breve. Ahora bien, ¿qué caracteriza a la cultura organizacional de Netflix? Para Bizneo, la compañía apela a la libertad y a la responsabilidad, "lo que significa que contratan a adultos que se espera que actúen como tal". Para ello, Netflix "propone un modelo con poco control gerencial y mucha flexibilidad". Es clave asimismo la gestión de los sesgos y es que, tal como apunta el artículo, "la compañía afirma que, como adultos, todos saben que cada uno de ellos tienen sesgos y deberían centrar sus esfuerzo en gestionarlos y no tanto en pretender que no les afecten".
La flexibilidad se pone de relieve también en las vacaciones, ya que la compañía -explican desde Bizneo- "no pone límites en los días que se necesiten ni impone un dresscode, ya que apelan a la responsabilidad de cada uno de sus empleados". La cara B de la cultura organizacional de Netflix reside en el grado de exigencia que se les demanda a todos ellos y es que "precisamente, al tratarles como adultos también se existe un alto nivel de exigencia que a veces va acompañado de cierta tensión e incluso cultura del miedo".
¿Qué hay de Nike?
Tal como señalan desde Bizneo, "si hay algo que caracteriza la cultura organizacional de Nike es la perfecta alineación que existe entre los objetivos de la compañía, la formación, los códigos y las relaciones". Así, prosigue el artículo, "la formación forma parte integral de su cultura", y es que la idea de la firma es que "la innovación es necesaria en una empresa y para que exista debe haber una buena formación".
Nike tiene asimismo programas como "Speak Up!" (¡Habla alto!), destinado a la expresión de ideas nuevas por parte de trabajadores y al intercambio de estas. "Además -apuntan desde Bizneo-, está decidido a aprender de los ciclos rápidos de desarrollo y aprendizaje propios de las compañías de software e incorporarlos".
Todo ello no evitó, señalan desde el propio artículo, que una empresa como Nike, con una plantilla y un equipo directivo notablemente masculinizado, acabara implantando una cultura con un excesivo grado de masculinidad, algo que, recuerda, "jugó un papel nocivo y tóxico que acabó teniendo problemas con sus empleadas y forzó al CEO a disculparse por ello públicamente".
Fuente: Equipos y Talento
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